Cómo uno debe implorar dirección, perdón y protección de Dios.

(Salmos 143:10) “Enséñame a hacer tu voluntad, porque tú eres mi Dios;
Tu buen espíritu me guíe a tierra de rectitud.”

(Salmos 142:1-2) “1 Con mi voz clamaré a Jehová; Con mi voz pediré a Jehová misericordia.
2 Delante de él expondré mi queja; Delante de él manifestaré mi angustia.”

Ten piedad de mí, oh Dios, conforme a tu misericordia;
Conforme a la multitud de tus piedades borra mis rebeliones.
Y límpiame de mi pecado.
Lávame más y más de mi maldad.
Sáname, oh Jehová, y seré sano;
Sálvame, y seré salvo;
Líbrame y Guárdame. Enséñame Tu verdad.

(Jeremías 17:14, 17) “14 Sáname, oh Jehová, y seré sano; sálvame, y seré salvo; porque tú eres mi alabanza.
17 No me seas tú por espanto, pues mi refugio eres tú en el día malo.”

(Salmos 51:1-3) “1 Ten piedad de mí, oh Dios, conforme a tu misericordia; Conforme a la multitud de tus piedades borra mis rebeliones.
2 Lávame más y más de mi maldad, Y límpiame de mi pecado.
3 Porque yo reconozco mis rebeliones, Y mi pecado está siempre delante de mí.”

(Salmos 35:1-10) Plegaria pidiendo ser librado de los enemigos
“1 Disputa, oh Jehová, con los que contra mí contienden; Pelea contra los que me combaten.
2 Echa mano al escudo y al pavés, Y levántate en mi ayuda.
3 Saca la lanza, cierra contra mis perseguidores;
Di a mi alma: Yo soy tu salvación.
4 Sean avergonzados y confundidos los que buscan mi vida; Sean vueltos atrás y avergonzados los que mi mal intentan.
5 Sean como el tamo delante del viento, Y el ángel de Jehová los acose.
6 Sea su camino tenebroso y resbaladizo, Y el ángel de Jehová los persiga.
7 Porque sin causa escondieron para mí su red en un hoyo; Sin causa cavaron hoyo para mi alma.
8 Véngale el quebrantamiento sin que lo sepa, Y la red que él escondió lo prenda; Con quebrantamiento caiga en ella.
9 Entonces mi alma se alegrará en Jehová; Se regocijará en su salvación.
10 Todos mis huesos dirán: Jehová,
¿quién como tú, Que libras al afligido del más fuerte que él, Y al pobre y menesteroso del que le despoja?”

(Salmos 106:4-5) “4 Acuérdate de mí, oh Jehová, según tu benevolencia para con tu pueblo;
Visítame con tu salvación,
5 Para que yo vea el bien de tus escogidos,
Para que me goce en la alegría de tu nación, Y me gloríe con tu heredad.”

(Salmos 5:1-3, 8, 11-12) “1 Escucha, oh Jehová, mis palabras; Considera mi gemir.
2 Está atento a la voz de mi clamor, Rey mío y Dios mío, Porque a ti oraré.
3 Oh Jehová, de mañana oirás mi voz; De mañana me presentaré delante de ti, y esperaré.
8 Guíame, Jehová, en tu justicia, a causa de mis enemigos; Endereza delante de mí tu camino.
11 Pero alégrense todos los que en ti confían;
Den voces de júbilo para siempre, porque tú los defiendes; En ti se regocijen los que aman tu nombre.
12 Porque tú, oh Jehová, bendecirás al justo; Como con un escudo lo rodearás de tu favor.”

(Salmos 7:1, 6) “1 Jehová Dios mío, en ti he confiado; Sálvame de todos los que me persiguen, y líbrame,
6 Levántate, oh Jehová, en tu ira; Alzate en contra de la furia de mis angustiadores,
Y despierta en favor mío el juicio que mandaste.”

(Salmos 43:1-3) “1 Júzgame, oh Dios, y defiende mi causa; Líbrame de gente impía, y del hombre engañoso e inicuo.
2 Pues que tú eres el Dios de mi fortaleza,
¿por qué me has desechado? ¿Por qué andaré enlutado por la opresión del enemigo?
3 Envía tu luz y tu verdad; éstas me guiarán; Me conducirán a tu santo monte, Y a tus moradas.”

(Salmos 51:10) “10 Crea en mí, oh Dios, un corazón limpio, Y renueva un espíritu recto dentro de mí.”

(Salmos 16:1-2) Una herencia escogida.
“1 Guárdame, oh Dios, porque en ti he confiado.
2 Oh alma mía, dijiste a Jehová: Tú eres mi Señor; No hay para mí bien fuera de ti.”

(Salmos 17:1, 3, 5-10, 13-14) Plegaria pidiendo protección contra los opresores
“1 Oye, oh Jehová, una causa justa; está atento a mi clamor.
Escucha mi oración hecha de labios sin engaño.
3 Tú has probado mi corazón, me has visitado de noche;
Me has puesto a prueba, y nada inicuo hallaste;
He resuelto que mi boca no haga transgresión.
5 Sustenta mis pasos en tus caminos, Para que mis pies no resbalen.
6 Yo te he invocado, por cuanto tú me oirás, oh Dios;
Inclina a mí tu oído, escucha mi palabra.
7 Muestra tus maravillosas misericordias, tú que salvas a los que se refugian a tu diestra,
De los que se levantan contra ellos.
8 Guárdame como a la niña de tus ojos;
Escóndeme bajo la sombra de tus alas,
9 De la vista de los malos que me oprimen, De mis enemigos que buscan mi vida.
10 Envueltos están con su grosura; Con su boca hablan arrogantemente.
13 Levántate, oh Jehová; Sal a su encuentro, póstrales;
Libra mi alma de los malos con tu espada,
14 De los hombres con tu mano, oh Jehová,
De los hombres mundanos, cuya porción la tienen en esta vida,
Y cuyo vientre está lleno de tu tesoro.
Sacian a sus hijos, Y aun sobra para sus pequeñuelos.”

(Salmos 25:1-2, 4-8, 16-22) “1 A ti, oh Jehová, levantaré mi alma.
2 Dios mío, en ti confío; No sea yo avergonzado, No se alegren de mí mis enemigos.
4 Muéstrame, oh Jehová, tus caminos; Enséñame tus sendas.
5 Encamíname en tu verdad, y enséñame,
Porque tú eres el Dios de mi salvación; En ti he esperado todo el día.
6 Acuérdate, oh Jehová, de tus piedades y de tus misericordias, Que son perpetuas.
7 De los pecados de mi juventud, y de mis rebeliones, no te acuerdes;
Conforme a tu misericordia acuérdate de mí, Por tu bondad, oh Jehová.
8 Bueno y recto es Jehová; Por tanto, él enseñará a los pecadores el camino.
16 Mírame, y ten misericordia de mí, Porque estoy solo y afligido.
17 Las angustias de mi corazón se han aumentado; Sácame de mis congojas.
18 Mira mi aflicción y mi trabajo, Y perdona todos mis pecados.
19 Mira mis enemigos, cómo se han multiplicado, Y con odio violento me aborrecen.
20 Guarda mi alma, y líbrame; No sea yo avergonzado, porque en ti confié.
21 Integridad y rectitud me guarden, Porque en ti he esperado.
22 Redime, oh Dios, a Israel De todas sus angustias.”

<<<<

(Salmos 90:12) “Enséñanos de tal modo a contar nuestros días, Que traigamos al corazón sabiduría.”

<<<<

(Salmo 119:28) “Se deshace mi alma de ansiedad; Susténtame según tu palabra.”

(Salmos 119:81) “Desfallece mi alma por tu salvación, Mas espero en tu palabra.”

<<<<

(Salmos 119:94) “Tuyo soy yo, sálvame, Porque he buscado tus mandamientos.”

(Salmos 119:124) “Haz con tu siervo según tu misericordia, Y enséñame tus estatutos.”

(Salmos 119:135) “Haz que tu rostro resplandezca sobre tu siervo, Y enséñame tus estatutos.”

<<<<

(Salmos 51:9) “9 Esconde tu rostro de mis pecados, Y borra todas mis maldades.”

(Job 34:32) “Enséñame tú lo que yo no veo; Si hice mal, no lo haré más.”

<<<<

(Salmos 143:8) “Hazme oír por la mañana tu misericordia, Porque en ti he confiado;
Hazme saber el camino por donde ande, Porque a ti he elevado mi alma.”

(Salmos 143:11) “Por tu nombre, oh Jehová, me vivificarás; Por tu justicia sacarás mi alma de angustia.”

<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<

“Oye, oh Jehová, una causa justa;
Está atento a mi clamor.
Escucha mi oración hecha de labios sin engaño.
Acuérdate de mí, oh Jehová, según Tu benevolencia para con Tu pueblo;
Levántate en mi ayuda;
Visítame con Tu salvación,
Di a mi alma: Yo soy tu salvador.
Tú has probado mi corazón, me has visitado de noche;
Me has puesto a prueba, y nada inicuo hallaste;
He resuelto que mi boca no haga transgresión.
Ten piedad de mí, oh Dios, conforme a Tu misericordia;
Conforme a la multitud de Tus piedades borra mis rebeliones.
Y límpiame de mi pecado.
Lávame más y más de mi maldad,
Sáname, oh Jehová, y seré sano;
Sálvame, y seré salvo;
Muéstrame, oh Jehová, Tus caminos;
Enséñame Tus sendas.
Encamíname en Tu verdad, y enséñame,
Envía Tu luz y Tu verdad; éstas me guiarán;
Sustenta mis pasos en Tus caminos, para que mis pies no resbalen.
Guárdame como a la niña de Tus ojos;
Escóndeme bajo la sombra de Tus alas,
Enséñame a hacer Tu voluntad, porque Tú eres mi Dios;
Tu buen Espíritu me guíe a tierra de rectitud.”